El sector financiero español ha propuesto al Ministerio de Asuntos Económicos extender el plazo de las hipotecas para ayudar a las familias vulnerables a lidiar con las cuotas tras la subida de los tipos de interés. Sin embargo, su aplicación se limita a ciertos casos específicos.
¿Quién podrá pedir la extensión del plazo de su hipoteca?
El borrador de Real Decreto que se aprobaría de forma temporal permitiría paliar los efectos de la inflación y la subida de los tipos de interés y el Euríbor, que afecta especialmente a las hipotecas de tipo variable o mixto. Aprobarlo mediante normativa es una forma de aplicar medidas de forma generalizada.
Sus características son:
- Se puede ampliar el plazo por un período máximo de 5 años adicionales, siempre que no se superen los 40 años de hipoteca desde su concesión.
- La cuota resultante de la novación no debe ser inferior a la última existente antes de la revisión del tipo
- La medida se prevé aplicar durante 12 meses desde su aprobación, así que es de carácter temporal.
El banco y el cliente deben acordar el nuevo plazo. El principal pendiente se amortiza con nuevas cuotas y seguirá devengando intereses según corresponda en el contrato inicial.
¿Qué bancos van a ofrecer esta posibilidad?
El protocolo será de libre adhesión por parte de las entidades bancarias. Eso significa que no es obligatorio. Para saber si tu entidad bancaria va a ofrecer dicha prórroga, el mejor camino es preguntar a tu asesor o a tu entidad directamente, una vez el Real Decreto se haya publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Los bancos que se adhieran están obligados a aplicar las medidas cuando el titular de la hipoteca demuestre que le es de aplicación.
Las entidades financieras deben responder al cliente que formule petición de extensión en 45 días desde que lo solicite. Además, deben informar a sus clientes y facilitarles la información en su web, y en las oficinas y sucursales. Este protocolo se enmarcará en el Código de Buenas Prácticas financieras que impulsa el Ministerio.
Otras medidas que se barajan son la transformación de las hipotecas de tipo variable en fijo o mixto, o bien la congelación de las cuotas durante 12 meses hasta que el Euríbor y los tipos del Banco Central Europeo (BCE) se estabilicen o bajen.
